Medidas de conciliación
Dormir mal es señal de estrés. Si le cuesta conciliar el sueño o mantenerlo, puede ser señal de que su equilibrio entre vida laboral y familiar está fuera de control. El ejercicio es una buena forma de mantener un patrón de sueño saludable. Intente dar un paseo de 20 minutos al día para poner su cuerpo en movimiento. El aire fresco te sentará de maravilla.
Por supuesto, el perfeccionismo puede ser estupendo para hacernos notar en el trabajo, pero a veces es por las razones equivocadas. Puede que tengas tanto miedo a “fracasar” que intentas que cada detalle sea correcto y acabas incumpliendo un plazo. De hecho, los errores pueden enseñarnos algunas de las mejores lecciones.
Si no te queda tiempo para estar con los tuyos, la conciliación de la vida laboral y familiar está fuera de lugar. Piénsalo, ¿te ve más tu portátil o tu teléfono que tu pareja? Reserva tu dormitorio para el relax y la diversión. No te lleves nada de tecnología a la habitación, ¡también te ayudará a dormir mejor!
Cuando encuentras tiempo para estar con tus amigos y tu familia, ¿te sientes inusualmente irritable? Esto puede deberse a que no tienes suficiente tiempo para ti como consecuencia de un equilibrio poco saludable entre trabajo y vida privada. Reflexiona sobre tus prioridades actuales. No pienses sólo en lo que deberías hacer, sino en lo que quieres hacer. Utiliza mi agenda para planificar tu día ideal. Equilibra el trabajo con tu vida familiar e intenta cumplirlo durante una semana.
Aplicaciones de conciliación
Todos conocemos la sensación de que las exigencias se acumulan en un lado de la balanza y dominan nuestros días. También puede que conozca la sensación de sueños y deseos incumplidos en el otro lado de la balanza.
Dicho esto, ¿cómo puedes gestionar tu tiempo y tu energía de forma que te sientas realizado y comprometido como un ser humano completo? ¿Qué puede permitirte mostrarte como tu mejor yo y evitar el agotamiento mental?
También puede referirse al nivel de flexibilidad que los miembros del equipo sienten que tienen. Por ejemplo, ¿le es posible integrar su trabajo con sus exigencias personales? ¿Puede responder a medida que surgen las necesidades? ¿Hasta qué punto interfieren el trabajo y las prioridades personales?
Según el informe de Gallup Women in America, el equilibrio entre trabajo y vida personal abarca todo lo que forma parte de una vida bien vivida. El informe sugiere que muchas mujeres ven la vida y el trabajo de forma holística. En consecuencia, buscan empleadores que puedan animarlas y apoyarlas como personas, no sólo como empleadas.
El reto de conciliar la vida laboral y familiar existe desde hace siglos. Los reformistas de principios del siglo XX abogaron por unas normas laborales justas en una época en la que la gente trabajaba habitualmente más de 100 horas a la semana.
Conciliación de la vida laboral y familiar
20 oct 2014,12:16pm EDT|Este artículo tiene más de 8 años.Este artículo forma parte de una serie sobre el equilibrio entre la vida laboral y personal. Echa un vistazo a los artículos complementarios aquí: Los 20 mejores trabajos para conciliar la vida laboral y familiar y 5 señales de que podrías ser un adicto al trabajo.
Hoy en día, conciliar la vida laboral y personal puede parecer una hazaña imposible. La tecnología hace que los trabajadores estén accesibles las veinticuatro horas del día. El miedo a perder el empleo incentiva a trabajar más horas. De hecho, en una encuesta de la Harvard Business School, la friolera del 94% de los profesionales en activo declaró trabajar más de 50 horas a la semana y casi la mitad dijo trabajar más de 65 horas semanales. Los expertos coinciden: el estrés acumulado por la interminable jornada laboral es perjudicial. Puede dañar las relaciones, la salud y la felicidad en general.
Muchos superdotados desarrollan tendencias perfeccionistas a una edad temprana, cuando las exigencias de su tiempo se limitan a la escuela, las aficiones y tal vez un trabajo extraescolar. Es más fácil mantener ese hábito perfeccionista de niño, pero a medida que creces, la vida se complica. A medida que se asciende en el trabajo y crece la familia, las responsabilidades se multiplican. El perfeccionismo se vuelve inalcanzable, y si ese hábito no se controla, puede llegar a ser destructivo, dice la coach ejecutiva Marilyn Puder-York, PhD, autora de The Office Survival Guide.
Cuestionario sobre el trabajo ideal
Mucha gente tiene “poco tiempo”, se apresura constantemente para hacer malabarismos con diferentes compromisos. Y los australianos trabajan mucho: más de 1 de cada 10 empleados trabaja más de 50 horas semanales, lo que la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) considera “jornadas muy largas”.
Un buen equilibrio entre trabajo y vida privada significa que hay armonía entre los distintos aspectos de la vida. Los beneficios obtenidos de cada área son capaces de apoyar y fortalecer las otras. Muchas personas están aprendiendo a combinar con éxito su vida laboral y personal (integración de la vida laboral y personal).
Los australianos trabajan más horas que la mayoría de los habitantes de otros países desarrollados de la OCDE, con menos tiempo para cuidar de sí mismos. Trabajar muchas horas puede afectar a la salud, aumentar el estrés y reducir las actividades de ocio.
Al mismo tiempo, aumenta el número de personas que trabajan a tiempo parcial, con salarios bajos y en empleos precarios, lo que también puede implicar trabajar en horarios no sociales. Los horarios flexibles y el trabajo desde casa pueden ser útiles, sobre todo si se tiene familia. Pero puede dificultar la conciliación, ya que no hay separación entre el trabajo y el hogar.